Todo el grave problema generado en la Central Nuclear japonesa, me ha llevado a informarme más a fondo acerca de los pros y los contras de la energía nuclear. Me he leído varios libros sobre el tema, ojeado informes, navegado en webs y al final, debo reconocerlo mi posición es 100% antinuclear. Por más que uno haga esfuerzos para caer en el posibilismo, no encuentro razones (razonables) para defender una energía peligrosa y cara. Razones que no estén sustentadas en el beneficio rápido de las grandes eléctricas, en la demagogia del desarrollismo sin límites o en la venta de tópicos como si de verdades bíblicas se tratara. Se lo juro, he intentado buscar razones para mantener una postura intermedia, ecuánime o desapasionada sobre el tema y al final, he llegado a la conclusión que la única postura razonada y razonable es defender el cierre paulatino, gradual… pero sin pausa de todas y cada una de las Centrales Nucleares. ¿Nucleares? No, gracias.
Os dejo este informe de Greenpeace sobre el tema.